El fin del mundo


Ella le dijo, vente en busca del fin del mundo.
El, callo en silencio y se quedo mirando las olas del mar.
Ella partió al fin del mundo, se perdió por el horizonte

La cobardía fue le traje que siempre vestía en sus días de olvido.
La tarde se evaporaba en un invierno negro de sueños difusos.
El seguía sentado en las rocas, llorando por el amor que navegaba sin barco.
Rosas destrozadas en la solapa del cobarde de pelos blancos y barba tres días.
Mañanas de esperanza en los días soleados.
Whisky en las tardes, bicarbonato en las noches.
Promesas en el amanecer.
Sueños entre sabanas rotas y amarillentas.
La puta vida en sus entrañas.
Drogas y sonrisas de dentífrico.

.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fotos antiguas de Benidorm

Mágica y eterna

Aprendiz