Francisco Mira

Cada amanecer del sol es amor. Ilumina mi corazón, bailo hasta extenuación. Cierro los ojos, escucho la canción, bailo con el amor. Felicidad, lagrimas en mis mejillas. recorren el rostro. Lagrimas del amor que dibujan, un te quiero, en mi cara. Sigo soñando, soñando con tu cuerpo, desnudo en el tapiz del amor. Tapiz de mi corazón. Es el amanecer, es un nuevo día, es el comienzo del amor. El sol nace tímidamente, sus rayos se mezclan entre la arboleda. Desnudo ante el universo, desnudo el amanecer, desnudo el amor. Desnudos venimos al mundo, como el amanecer.

Cada mañana en silencio escribía unas letras en su diario, la figura central era el amor. Con las ventanas abiertas y el sonido de las olas del mar al fondo, posaba su caligrafía en la cuartilla del diario que compro en la ciudad del amor. Escritos que muchas veces terminaban en poesía, su pasión, maldecía a su timidez porque allí se escondía versos hermosos, dignos de ver la luz. Escritos al amanecer que colmaban la sed de sentimientos de amor que nacían de su humilde y noble corazón. "Tu sonrisa me ilumina en el caminar de la vida, tus besos calman mi sed, nuestros cuerpos es el fuego de la pasión". Cada beso es una flor. La rosa del amor. Amor en el amanecer. En estos días que vivimos y que las redes sociales son los iconos de los jóvenes en esta sociedad moderna, el cuaderno o diario intimo, esta siendo olvidado, pocos  revelan en ellos sus sentimientos de amor, escritos con estilográfica y caligrafía perfecta. Los diarios están pasando al olvido, estos cofres ...

Días de amor. Días de paz. Corazón enamorado. Gotas de amor. Gotas de felicidad. Gotas de pasión. Así es la flor del jardín. Las pequeñas cosas son las que engrandecen el mundo. Regalar una flor, es regalar amor. La flor del jardín del amor. La flor en la solapa. La flor en tu mano. La flor en tu corazón.

Hoy 6 de Octubre vine al mundo, gracias a unos padres maravillosos y en especial a una madre, que dio a luz. Estoy en el medio siglo de edad, parece que fue ayer la infancia, la adolescencia, la juventud, muchos momentos como el nacimiento de mi hija, después a los tres años el de mi hijo, la vida sigue su curso, cada día es un aprendizaje. En este 6 de Octubre la protagonista es mi madre, a la que le debo mi luz, quien junto a mi padre nos enseñaron el camino de la bondad y fraternidad y siguen siendo ejemplo de lo que es ser buenas personas. Un día de otoño. Otoño lluvioso y ventoso. 6 de Octubre. Una luz brillo. Siete años después. Otra luz brillo. Es octubre. Mes otoñal. Cincuenta velas. Las velas del amor. Resplandecen en el corazón. De noche y de día. Gracias a mis padres, por haberme concebido. Gracias a mi madre por haberme traído al mundo. Gracias a dos soles que son mi prolongación. Gracias a ti, que lees en silencio y siempre que pido un conse...