Vidas

 En este túnel del pasadizo que es el camino donde como un vagabundo transito entre las copas de coñac aposentado en la barra del bar, huyendo las noches vacías y oscuras intentado saber que hago aquí a estas horas en este bar de carretera abierto toda la noche, donde los sufridos camioneros toman un café para poder seguir trabando en la esclavitud del transporte nocturno. Las miradas frías, cansadas, en esta puta vida como es la mía, hijo de una madame y padre desconocido,  las malas lenguas dicen que es un famoso banquero..

Comienza amanecer abandono la posada nocturna camino hacia ninguna parte, en busca de chatarra y unas monedas para sobrevivir con las cirrosis acuestas. 

Nunca quise cambiar, por eso no me quejo de mi suerte, esta es mi vida, y dicen que no hay nada bueno en mi, eso dicen los cobardes de la vida, esclavos de sus penurias cada noche cuando cierran las puertas de sus mansiones, que relegaran ramos a sus esposas cada 14 de febrero, pero se acuestan con la madame más caras de la ciudad.

Cada vez soy mas feliz en mi micro mundo, porque no engaño a nadie.