LA MUSA



Acabo de comer se tumbo en el sofá, hojeo una revista, era las tres de la tarde, de repente se levanto salió al ventanal que miraba hacia el mar, era una tarde espléndida de primeros de mayo, se puso el bikini y una blusa se bajo a la playa, mientras caminaba por las tablas que estaban encima de la arena miraba a su alrededor para donde iba a dirigirse, esta casi vacía, el mar reposaba con una tranquilidad agradable su ruido de las pequeñas olas eran una sensación para sus oídos, llego casi hasta la orilla, extendió su toalla, se quito su blusa, se tumbo, su cuerpo esta blanco era los primeros rayos de sol, se le olvido coger el protector solar, no pasa nada, pensó voy a estar poco tiempo, se coloco sus gafas de sol, e intento dormir mirando hacia arriba, el sonido del mar transmitía una calma infinita, se estaba muy relajada, el viento suave era agradable, sus ojos se cerraban poco a poco, su mente en blanco, pero una música que se oía desde un pequeño aparato de una joven pareja de unos quince años que estaban a unos pocos metros y que acaban de llegar, le surmegieron en recuerdos tristes pero agradables la vez, la voz le era familiar, fue canción de moda algunos años atrás, siete justamente, pero que fue de aquel grupo de dos chicos y una chica.

Las actuaciones de pequeños locales donde muy poca gente iba, muchas veces ni les pagaban, tres jóvenes con ilusiones, grabando maquetas, recorriendo casas discográficas, recibiendo negativas, evasivas, o mentiras, falsas promesas, hasta que un buen día, en un local cutre y sucio que actuaban les vio un representante de una multinacional.

Empezo una carrera vertiginosa, grabar, actuar en conciertos, televisiones, la voz era de la chica de cabellos rubios de aspecto jovial, el bateria era su novio, la guitarra era el otro componente del grupo y su cerebro, quien maneja las riendas del grupo.

Una noche le fue infiel a su novio y se acostó con el otro chico, a partir de aquel desliz el grupo se resquebrajo, seguía queriendo a su novio, estaba muy mal, aquella noche la pelea con su novio acaba en venganza de ella, eso no eran formas, estaba arrepentida, el otro chico la acosaba siempre que podía, fue una guerra interna en su ser, hasta que exploto al mes, cuando le contó a su novio el desliz, fue el final del grupo.

Su vida giro en vaivenes se aparto del mundo de la música, sus ilusiones se partieron, su tristeza la apago, se dedico a vivir de rentas, monto un par de negocios pero fueron un desastre, y alli estaba en aquella playa toda melancólica escuchando aquella voz, que un día era la suya.

Se levanto se fue de la playa con lagrimas tapadas por las gafas de sol, fue una soñadora de la canción, era una voz dulce que trasmitía amor, ahora era una chica sin horizontes.

Mientras se dirigía al apartamento, una luz la ilumino, era joven, su voz estaba intactacta un poco descuidada, pero su corazón desde en ese mismo instante le estaba dictando una canción.

Cogió su guitarra la probo, unas notas, lápiz y un papel escriben aquella fuente de sentimientos que nacían de su interior, toco un par de notas.
Al anochecer aquella canción estaba compuesta letra y musica, quizás le faltaban algunos arreglos tanto de musicales como de voz.
Amaneció estaba acabando otra canción, se olvido de cenar, de ducharse, esta naciendo otra vez, las fuerzas que se perdieron, ahora estaba muy imponente, por fin se estaba encontrando.

Pero las puertas estaban cerradas, era empezar de cero otra vez, aquello le dio ímpetu para mejorar, la conocían, era un buen proyecto le comentaban, su música estaba muy vista, no era el momento para los cantautores, una chica de pop, no-tenia hueco en aquel lugar.
Sus canciones narraban sus tragedias, sus errores y el canto a la esperanza, pero su meta estaba por llegar y lucharía para llegar a plasmar aquel ilusionarte mundo que llevaba, su voz era su alma y su guitarra su corazón.

Desde aquel día toco en pequeños garitos donde palpaba el calor a la gente, el aliento, sus voces, donde el cariño entre ambos era mutuo, se querían, se amaban, se respetaban, era muy feliz llegando a ese pequeño mundo, que son quienes quieren a la musica, quien de verdad entienden, la viven, saborean como un buen vino, sufren, lloran, es aquella bendita gente que hace posible que la voz no muera.

Ahora era ella quien no quería saber nada de las discográficas, ni multinacionales, la buscaban, porque el boca a boca era la mejor publicidad.

Ella era agradecida a su pequeño mundo de locales diminutos, su gente fiel, que la seguía y tenia muy claro, que no iba cambiar.

No era amante de los toros, cada vez que tocaba, las primeras palabras se las dedicaba al tendió. VA POR USTEDES.

Entonces tiraba al tendido algunas partituras y cantaban juntos toda la noche, donde su publico era sus coros, que coros, majestuosos. Que voces, que sensaciones, magia alrededor de la canción, directo autentico, donde eran todos cantantes y escuchantes a la vez.

Noches enteras de voces y notas que solo paraba la afonía, cantando, bebiendo y disfrutando. Las discográficas llorando por sus negativas, porque aquella cantante los años no le habían llevado madurez y aquella tarde en la playa le aparecio.

Era la musa de la cantautores, era divina.

PD. La foto es de internet.

Comentarios

Que bonito Merl, y es que uno puede perseguir sus sueños tenga la edad que tenga, y si no se puede cantar, pues se ceden las letras, pero se es parte de lo que uno siente y sabe hacer.

Un besazo

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